Otra vez adios
Carlos Alberto Montaner
Abogado, escritor, periodista. Miembro del Consejo Internacional de la Fundación Atlas para una Sociedad Libre.


David Benda, quien realizó el último retrato de Sigmund Freud, es el nombre tras el que se esconde un joven y extraordinario pintor. David es judío y vive una intensa pasión con una bella joven vienesa “aria”, en un momento histórico terrible en que esas relaciones son un delito. Los nazis están a punto de entrar en Austria, y esa invasión será el preludio de la Segunda Guerra Mundial y de una fascinante historia de amor, violencia y resistencia a la tiranía.


David huye a La Habana a bordo del Saint Louis, “el barco de los condenados”, ciudad donde vuelve a enamorarse y donde desea ardientemente echar raíces y olvidarse para siempre de Europa y sus crueldades. Lo atormentan el recuerdo de una muerte trágica y la necesidad de vengarse de un asesino al que una vez consideró su amigo. Lamentablemente, tampoco consigue arraigar en Cuba. Otra vez tiene que huir a un nuevo país y, sin proponérselo, a otros brazos.

En Nueva York se reencuentra con un viejo amor de juventud y se aproxima de nuevo a la felicidad. La historia de David Benda, llena de aventuras y desventuras, de amores y desencuentros, es la del siglo que terminó hace pocos años. De alguna manera, es la historia de todos.

Mi Opinión:

Escrito en tercera persona, Otra vez adiós nos narra la historia de Ludwig Goldstein. Un judío interesado en la pintura, que por varios motivos, se ve obligado a cambiar su vida más de una vez.

La historia está narrada en su mayoría por el protagonista, aunque hay algunos capítulos que son dedicados a entender mejor la vida de los personajes secundarios, y estos son narrados por ellos mismos.

Decidí leer este libro porque desde muy pequeña, siempre me ha interesado conocer e indagar más a fondo sobre la segunda guerra mundial. ¿Por qué exactamente? No lo sé, pero siempre que puedo veo películas, documentales y libros sobre el tema. Y esta historia habla de lo que ocurría fuera de Europa durante esta época, lo cual lo hace mucho más interesante.

El libro está dividido en tres partes, y cada parte en capítulos. Los capítulos son nombrados con un título y un número. La historia es contada cronológicamente. El autor utiliza un lenguaje formal. Va dirigido a un público maduro. Es un libro que se lee con facilidad, la historia es clara y concisa, sin exceso o falta de descripción o diálogos.

¡Me gustó mucho el libro! Me agrada la forma en que el autor logra combinar los hechos históricos de la época con la vida de David Benda, y crear diálogos con personajes tan importantes como Ernest Hemingway, Fulgencio Batista, Sigmund Freud, entre otros.

Disfruté mucho leer este libro hasta su última página. Me identifiqué con cada uno de los personajes, porque a pesar de no haber vivido lo mismo que ellos, mi vida también ha tenido altas y bajas como cualquier otra. Y en esta historia, aunque las cosas fueran en contra de David Benda, él siempre supo mantenerse con la cara en alto y enfrentar cada uno de los obstáculos con coraje y valentía. Por eso estoy de acuerdo con la sinopsis: “De alguna manera, es la historia de todos.”

En verdad recomiendo este libro. Una lectura totalmente enriquecedora e informativa.
 

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